Esta obra es el homenaje personalísimo, ameno y original del editor Manuel Arroyo-Stephens a México y a su abrumadora capital, a su pasado y su presente, a sus sabores, olores y colores, a sus cielos, tierras y mares, y sobre todo a sus personajes, propios y adoptivos, con quienes el autor tuvo la suerte de cruzarse durante los años que vivió entre México y España.